Por redacción 

Con la llegada de las bajas temperaturas, las acciones preventivas en el hogar pueden marcar la diferencia entre un invierno tranquilo o uno lleno de reparaciones costosas. La Junta Central de Agua y Saneamiento (JCAS) lanza un llamado a la ciudadanía para que tome medidas simples pero efectivas para evitar el congelamiento y rotura de tuberías durante la temporada invernal.

Aunque el problema pueda parecer menor, las consecuencias de no proteger adecuadamente las instalaciones hidráulicas pueden ser significativas: desde cortes prolongados de agua hasta inundaciones dentro del hogar. Por ello, la JCAS propone una serie de recomendaciones que no solo buscan prevenir daños materiales, sino también promover un consumo responsable del recurso hídrico.

Antes de que las temperaturas desciendan, es fundamental revisar el estado de las tuberías. Según la JCAS, las fugas de agua representan puntos críticos de congelamiento, por lo que su reparación debe ser prioritaria. Además, sellar grietas en las paredes que albergan fontanería contribuye a mantener el calor necesario para evitar el congelamiento del agua en las tuberías.

Para quienes buscan soluciones económicas, materiales cotidianos como periódico o plástico pueden actuar como aislantes improvisados. Sin embargo, también existen productos especializados disponibles en el mercado que ofrecen mayor protección. La clave está en asegurar que el recubrimiento esté bien ajustado y fijado con cinta adhesiva para evitar desplazamientos.

Una de las recomendaciones más efectivas, aunque menos conocida, es cerrar la llave de paso principal y vaciar las tuberías cuando las temperaturas sean extremadamente bajas. Esto reduce significativamente el riesgo de rupturas, pues el agua congelada tiende a expandirse y puede causar daños severos en las instalaciones.

El invierno también es una oportunidad para reflexionar sobre el uso responsable de los sistemas de drenaje. La JCAS alerta sobre el riesgo de arrojar restos de comida por el fregadero, práctica que puede obstruir las líneas de drenaje, especialmente en esta época del año. En su lugar, recomienda el uso de canastillas en las coladeras como una solución sencilla y eficiente.

Asimismo, la institución desaconseja el uso de productos anticongelantes en las tuberías debido a los riesgos que representan para la salud.

Con estas medidas, la JCAS busca que las familias puedan disfrutar de un invierno sin complicaciones. La prevención no solo ayuda a proteger el hogar, sino que también contribuye al cuidado del agua, un recurso vital que debe ser valorado y utilizado de manera responsable.

Prepararse para el frío no tiene por qué ser complicado. Con un poco de atención y acción a tiempo, las sorpresas desagradables pueden quedarse fuera de esta temporada invernal.